
11 Ago YOGACHARYA OLIVER BLACK Y PARAMAHANSA YOGANANDA
: Yogacharya Oliver Black fue uno de los grandes discípulos laicos de Paramahansa Yogananda. Esta publicación contiene una pequeña anécdota, un artículo periodístico de una entrevista al Yogacharya y una carta del Gurú a su discípulo.
Yogananda se manifiesta ante Oliver Black
El Maestro Yogananda le pide al Yogacharya Oliver Black que se mantenga en contacto frecuente con él, que le escriba o le llame por teléfono con frecuencia. Pero por alguna razón nunca lo hizo, rara vez se comunicaba con el gurú.
Después de algunos años de esto, una mañana mientras estaba sentado en el suelo de su habitación de meditación, abrió los ojos y vio a Yoganandaji sentado justo frente a él. Estaba seguro de que no era una visión sino una materialización física. Yoganandaji estaba sentado de espaldas al Sr. Black. Su largo cabello estaba recogido en una especie de moño en la nuca y vestía una bata vieja muy andrajosa (palabras del Sr. Black). Oliver esperó a que el Maestro hablara o hiciera algo, pero entonces claramente tuvo la impresión de que su gurú estaba disgustado con su falta de comunicación y por lo tanto le dio la espalda. Después de mirar la espalda del gurú por un rato, cerró los ojos y reanudó la meditación.
Después de la meditación, cuando supo que podía comunicarse con la sede de Mount Washington por teléfono, hizo una llamada de persona a persona a Faye Wright, la futura presidenta de Self-Realization Fellowship (conocida como Sri Daya Mata). . “Dime”, le preguntó tan pronto como ella llegó al teléfono, “¿el Maestro alguna vez se pone el pelo en una especie de moño en la parte posterior de su cuello?” “A veces lo hace en su habitación cuando los demás no están cerca”, le dijo. “Bueno, dime esto. ¿Alguna vez usa una bata de baño vieja y gastada? «¡Vaya! ¡Esa cosa vieja! Exclamo ella. “Ha estado usando eso en meditación durante años. Es tan horrible que seguimos amenazándolo con quitársela y quemarla. ¿Porque lo preguntas?» Así que él se le dijo. Y desde entonces mantuvo contacto frecuente con su Maestro.
“Secretos del Yoga del Sr. Black de Detroit y Yogananda de la India”
por Eileen Wood Jasnowski, revista Self-Realization, enero-marzo de 1967
Paramahansa Yogananda y J. Oliver Black, Los Ángeles, 1946
Este artículo apareció el 10 de julio de 1966 en “Detroit”, revista semanal publicada por “Detroit Free Press”, Michigan.
(extractos)
Hay un nuevo tipo de hombre en la esfera de los… místicos en taparrabos. Él es J. Oliver Black, un gran yogui americano. Dirige servicios de Raja Yoga (meditación) en el Instituto de Artes de Detroit todos los domingos. El elegante Oliver Black parece tan alejado del indio escasamente vestido como uno se pueda imaginar. Se parece más a un próspero ejecutivo del Medio Oeste, principalmente porque lo es.
Black hizo su fortuna en la industria del automóvil a principios de los años veinte. La historia tal como la cuenta es vívida y vibrante. Pero uno se inclina a la incredulidad; la estrella de semejante drama tendría que tener setenta y tantos años.
“Por supuesto que soy yo”, admitió. “Mi esposa y yo celebramos nuestro quincuagésimo aniversario de bodas en abril pasado. Nunca me he sentido mejor en mi vida”.
¿La razón? Un encuentro casual con Yogananda, el gran Maestro hindú.
“Yogananda me enderezó. Cuando lo conocí por primera vez hace 35 años, tenía miedo de alejarme media milla de una farmacia. Yo era un hipocondríaco habitual. Tomé aspirinas para los dolores de cabeza, pastillas laxantes, y probablemente habría tomado tranquilizantes si los hubieran tenido. …
“Yo también era víctima de mucha tensión interior, como todos mis colegas. Los gigantes del automóvil hicieron sus fortunas, y rara vez vivían para disfrutarlas… Además de dirigir una empresa exitosa, “Peninsular Metal Products”, estudiaba y enseñaba en una pequeña clase de filosofía. Tratábamos de encontrar una respuesta a la existencia del hombre. Todo el mundo lo hace, a su manera. Estaba cerca de los 40 cuando conocí a Yogananda…
¿Qué fue tan importante de su encuentro con Yogananda?
“Cambió toda la dirección de mi vida… Soy estadounidense y estaba impaciente por obtener resultados. Los quería de inmediato. Yogananda me enseñó que las cosas importantes no se logran de la noche a la mañana… Tienes que hacer el trabajo: ningún predicador, sacerdote o experto puede hacerlo por ti…
Paramahansa Yogananda con (de izquierda a derecha) Dr. Lewis, Rajarsi Janakananda, Oliver Black y el Hno. Bhaktananda (sentado)
¿Podría Black darle al empresario estadounidense su fórmula para vencer la tensión?
…Un yogui quiere que todos aprovechen los mismos beneficios que él ha tenido. Sabes, el yoga no es una religión. Es una ciencia, y estamos en la era científica. La ley de causa y efecto se aplica aquí, tan claramente como cuando mezclas amarillo y azul y obtienes verde. Es un hecho. Ahora bien, cuando comienzas a estirar las terminaciones nerviosas y los músculos, y a flexionar las articulaciones de la columna vertebral, los tobillos, las rodillas y la cadera, naturalmente mejorará tu salud y te sentirás mejor. Inmediatamente.
Al estirar los nervios, disminuye la tensión. El yoga es para todos, no solo para unas pocas personas. Ayuda a los adolescentes con problemas de postura, complexión y crecimiento; definitivamente les ayuda a superar los complejos de inferioridad de la adolescencia. Las personas mayores obtienen todos los beneficios de la calistenia sin ninguno de los inconvenientes. Todos podemos hacer estos ejercicios si nos enseñan correctamente… ¡Los hombres y las mujeres de sesenta y tantos años se vuelven tan flexibles que tienen una mejor postura y salud que sus hijos!”.
“Si aprendes a respirar correctamente, y nada más, ¡vale la pena! Los médicos están señalando lo que los yoguis sabían hace 5000 años. La respiración adecuada previene los ataques cardíacos, una de las principales causas de muerte prematura de los hombres estadounidenses. ¿Qué otras enfermedades golpean a los ejecutivos? Úlceras y paros cardiacos. La respiración adecuada y los ejercicios de yoga te ayudan a evitar estas enfermedades. Los problemas de espalda que aquejan a muchos hombres y mujeres son causados principalmente por sus terribles posturas. La columna vertebral debe estar erguida, y el yoga te enseña cómo trabajar en esto…
“El yoga te hará perder peso, lo redistribuirá y te fortalecerá. Mejorará su memoria y agudizará su capacidad intelectual. Dejarás de resfriarte cada invierno. Tu cabello crecerá más rápido que antes. Nuestros maestros trabajan para ejercitar la columna vertebral, los tobillos y las rodillas. La mente y el cuerpo trabajan juntos; a través de la concentración aprenderá a controlar el equilibrio… Al invertir la atracción de la gravedad en algunos de los ejercicios ‘de inversión’, no solo rejuveneces tu cuerpo sino que también mejorará sus facultades mentales…”.
Además de hacer unos sencillos ejercicios de yoga todos los días, ¿qué más recomiendas para combatir las tensiones de nuestra época?
“Tengo otras dos sugerencias”, dijo. “Estas pistas son tan simples que nuestros inteligentes estadounidenses no las seguirán. Después del ejercicio, el segundo consejo es: cuida tu dieta. Deja de cavar tu tumba comiendo puré de patatas, salsas espesas, vegetales demasiado cocidos y pasteles de harina refinada. Las frutas frescas y las verduras crudas o apenas cocinadas son tus mejores amigas. … Comemos las cosas equivocadas y nos morimos de hambre de aquello que nuestros cuerpos piden a gritos”. …
¡YOGACHARYA OLIVER! [Oliver Black] llevó a cabo su última Iniciación Kriya como Ministro de Self-Realization Fellowship en junio de 1989 en Song of the Morning Ranch (Un ashram fundado por él)! ¡Abandonó conscientemente su cuerpo a la edad de 96 años! el 16 de septiembre! del mismo año!
¿Cuál es tu tercer consejo?
“Este es el que la mayoría de nosotros realmente queremos aprender, pero no sabemos cómo ni adónde ir”, dijo. «Todos supimos esto alguna vez, ¡pero lo hemos olvidado! ¡Queremos aprender a meditar, a estar solos sin aburrirnos ni tener miedo! El poeta W. H. Auden llamó a nuestro tiempo ‘la era de la ansiedad’. Seguirá siendo así hasta que aprendamos a encontrar la paz interior en la que una vez, originalmente, estábamos inmersos. ‘Estudia para saber estar quieto’, dice San Pablo. ‘Aquiétate y sabe que yo soy Dios’, dice la Biblia. Y los yoguis te lanzan un desafío que te mantendrá ocupado el resto de tu vida: “Aprende a aquietar tu mente inquieta”.
Obviamente ha funcionado para él y para muchas de sus variadas congregaciones, algunas de las cuales conducen regularmente desde Chicago, Cleveland y Lansing. Todos los domingos hay visitantes de lugares tan lejanos como la ciudad de Nueva York, Nueva Escocia y Toronto.
“Me jubilé en 1951”, dijo Black. “Luego me quedé en la junta directiva de mi empresa por un tiempo hasta que Yogananda me dijo que también lo dejara. Dijo que mi verdadero trabajo era enseñar, no predicar. No pensé que fuera competente para hacer eso, pero él solo me miró con sus ojos oscuros y convincentes, y dijo: ‘Eso es lo que piensas, Oliver’. Así que hice lo que dijo, y he nunca he sido más feliz. …
“Nunca he tenido nada que me proporcione mayor alegría que mi trabajo en. el yoga. No puedes amar la vida a menos que la des. La alegría de todos es mi alegría, y esa es la bebida más deliciosa que puedas imaginar. Pero muy pocos lo han probado. La mayoría de los hombres no han aprendido a renunciar a los hábitos egoístas en esta vida. Yogananda solía decir: «Si eres tacaño con Dios, Él será tacaño contigo».
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¡¡Carta a Yogacharya Oliver Black de Paramhansa Yogananda, 11 de mayo de 1951!! [Ver carta abajo]
(fragmentos)
Querido,
Tu venida (visita) fue una ocasión memorable porque sentí que capabas el espíritu de la obra que los Maestros y Dios están guiando. ….
Estoy tan feliz de que te haya gustado el SR Lake Shrine y que hayas sintonizado con Stanley. Veo todos estos contactos reflejados en tus esfuerzos recientes para difundir la Causa en Detroit. Por lo tanto, es bueno no alejarse demasiado del Centro Madre.
Veo que tu promesa de mejorar la obra en dos años se ha acelerado a partir de tu visita y no esperaste los dos años. Por supuesto, es menos de dos años ahora. ¿Estás sonriendo?
El Centro de Detroit se parece al Taj Mahal y me complace que hayas elegido ese lugar para el Centro. El Centro principal debe estar en un lugar céntrico como ese, pero el retiro debe estar lejos del corazón de la ciudad. En las afueras de la ciudad, dicen los yoguis. En este posada transitoria de vida creada por Dios, es tan maravilloso encontrar almas-hermanas como ustedes que están dispuestas a trabajar para Dios y así encontrar el sentido de la vida; y acatando Sus deseos, finalmente unirse con Él. ….
Me alegró mucho recibir los Anuncios del Centro de Detroit y ver que todo está siguiendo el esquema de la Organización. ….
Con todo mi amor y bendiciones, sin fin.
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