20 Abr BIENAVENTURADOS LOS PACIFICADORES – HERMANO ACHALANANDA

BIENAVENTURADOS LOS PACIFICADORES

Por el Hermano Achalananda – Extractos de una charla en la Convocación de 2010, 1 de agosto.

Sé un pacificador

La convocatoria ofrece una maravillosa oportunidad para reafirmar nuestra fe, en que estamos avanzando en un mayor espíritu de amor.

Saludo de Sri Daya Mata: “Gurudeva solía estar deseoso esperando la Convocación. A menudo decía: «Prefiero un alma a una multitud, pero amo a una multitud de almas». Rezaré para que puedas dejar de lado nuestras preocupaciones mundanas. A medida que nos sintonicemos con la bendición del Maestro, elevaremos nuestra mente y nos volveremos a conectar, y nos daremos cuenta de cómo el Gurú nos quiere a cada uno de nosotros. Abrid vuestros corazones para sentir la presencia de Dios. Aplicad principios de pensamiento y acción correctos hacia los demás. Es lo que hacemos con lo que escuchamos lo que puede transformar nuestras vidas. Que sientas una nueva determinación de hacer cambios positivos en tu vida”.

Cómo convertirnos en dadores de los dones de la Paz, interna y externamente: si queremos expresar lo externo, debemos expresar lo interno. Si quieres ser un pacificador, necesitas traer paz a tu propia vida. Si hacemos esto, estaremos haciendo nuestra parte para cambiar el mundo. Todo comienza con el individuo. El Maestro dijo: “Cámbiate a ti mismo y habrás hecho tu parte para cambiar el mundo”.

En el Sermón de la Montaña se dice: “Bienaventurados los pacificadores porque ellos serán llamados hijos de Dios”. Mateo 5:9 – esto es una comprensión más profunda de lo que significa ser un pacificador. Recuerda el comentario del Maestro: Hay verdaderos pacificadores que generan paz a partir de sus meditaciones devocionales. La paz es la primera manifestación de Dios. Cuando meditamos, la primera respuesta de Dios es la paz. La naturaleza de Dios es la paz interior.

La conciencia del Hijo de Dios (la Conciencia Crística) hace que uno se sienta uno con todos los seres. Todos los hijos de Dios son almas y Sus hijos necesitan aprender a vivir en esa misma conciencia. Solo hay una raza: la raza humana. A los seres humanos se les ha dado un poder potencialmente ilimitado para demostrar que son hijos de Dios. Debemos conquistar los corazones con el poder del amor. La fraternidad es el mayor impedimento para la guerra. El poder del hombre para crear la guerra está aumentando, por lo que su poder para crear la paz debe aumentar.

La Segunda Venida de Cristo – Discurso 26: “Todos los prejuicios y enemistades deben desaparecer. Cuando estamos atrapados en el ego, somos hijos del hombre, no hijos de Dios”.

Naturaleza del alma – hijos de Dios

Naturaleza del ego – hijos del hombre

La paz para el mundo debe comenzar con la amistad divina para todos. Una paz que sobrepasa todo entendimiento, más allá de las palabras, más allá del intelecto humano. Pero podemos sentir esta paz para todos en meditación profunda. Si nos detenemos y miramos nuestra historia, vemos que es la historia de las eras oscuras de las guerras, las turbulencias de las edades más oscuras que la humanidad conoce. Se necesitan más que unos pocos para traer la paz. Cuanto más nos ponemos en contacto con la paz interior, más la expresamos fuera. Cuanto más una persona experimenta la paz de Dios, más fácil es difundir la voluntad de Dios a los demás. Percibiríamos a todos los seres como uno. No es solo un concepto, sino una realidad viva. Expande el amor natural de tu corazón.

Las técnicas de meditación de nuestro Gurú ayudan a expandir el amor natural del corazón. Algunos consejos para profundizar en la meditación para que podamos sentir una mayor paz: Postura: la columna vertebral debe estar erguida. No te sientes con la espalda contra la silla a menos que sea una necesidad. La postura debe ser cómoda para que puedas sentarte horas y horas sin moverte. Si te mueves, la conciencia va allí, hacia la sensación, y la mente se irá divagando. Controlar la mente: sentarse quieto, la mente se calma si el cuerpo no se mueve. Pon la mente en las técnicas y manténgala enfocada allí. Eso calmará la mente. ¿Por qué es tan difícil controlar esta mente de mono? No te desanimes si la mente divaga: mantenla enfocada en una técnica. Cuanto más se profundiza en el alma, más paz se siente.

El quinto Paso de Patanjali es Pratyahara – la interiorización de la mente. Cuando esto sucede, vemos que nuestras meditaciones cambian. Si seguimos llamando a las puertas del silencio, Dios nos ayudará.

Creamos nuestras propias pesadillas al igual que creamos nuestros propios sueños de paz. Somos como niños. Cuando termina la película, la vemos una y otra vez, en lugar de ir a casa. ¿Cómo rompemos nuestra fascinación con la película cósmica? Necesitamos renunciar a algunas cosas que nos alejan de Dios. Necesitamos practicar las técnicas. Necesitamos alcanzar ese estado interior del ser.

En el Guita, capítulo 4, Verso 2: “El yoga es un camino de acción espiritual”. Las actividades materiales son como ir por callejones sin salida. Necesitamos llegar a conocernos a nosotros mismos por lo que realmente somos. Renuncia interior: el ego se resistirá y luchará contra nosotros.

Incluso una pizca de estas técnicas del Maestro nos liberará de este miedo. No hay desperdicio de nuestro esfuerzo. Cada esfuerzo cuenta. Si una persona desea la salvación, eso se planta para siempre en la supraconciencia. Algún día, en alguna vida, cada uno debe dar este primer paso.

El Hermano contó la historia de una meditación de tres horas que tuvo antes de convertirse en monástico. Fue al Templo de Hollywood y fue una verdadera lucha durante las tres horas completas. Hizo fila para recibir la bendición del Dr. Lewis, quien le susurró al oído: «Excelente meditación, ¿no?».A veces, cuando luchas más, estás progresando más. La lucha está ahí para que te vuelvas más fuerte. Te vuelves más fuerte al tener que hacer algo que no has hecho antes.

Uno no obtiene una técnica tan elevada como Kriya Yoga al comienzo de su viaje, sino al final. Los resultados vendrán. Una vez que la mente tiene el control, comenzamos a meditar y luego vienen los beneficios. No te preocupes demasiado por el drama del mundo. Busca el reino de Dios. No te preocupes, pues así te quedas atrapado por la agitación interna. Hay que superar la preocupación y el miedo y todas esas cosas que crean una falta de paz en nosotros mismos. La obra del Maestro todavía está adelantada a su tiempo, pero está creciendo porque hay una gran necesidad de estas enseñanzas.

La meditación desarrolla la intuición. Cuanto más profundamente medites, más se desarrollará tu intuición. Estamos en un momento crucial en este planeta porque no hay suficientes personas que hayan cambiado a una conciencia espiritual superior. Si las personas no cambian voluntariamente, los acontecimientos nos obligarán a cambiar. No te dejes atrapar por el pesimismo de las cosas. Sólo sigue adelante, centrado en el espíritu. El camino a la felicidad es a través de la meditación y la sintonía con Dios. Nuestro objetivo es ser un pacificador, primero adentro y luego afuera.